Recomendaciones para coloración de PVC flexible
El PVC flexible es uno de los materiales más utilizados en el sector ferretero, funciona como aislante debido a su baja conductividad térmica y se emplea en el recubrimiento de cables de diferentes tipos, con aplicación en ambientes agresivos, tales como exposición a altas temperaturas o enterrados a profundidad.
Por su amplia versatilidad, la necesidad de coloración de productos va más allá del aspecto estético y llamativo, ya que el color, brillo u opacidad pueden ser determinantes en la identificación de su utilidad. El PVC flexible está presente en diversas áreas como en la construcción, energía, salud, preservación de alimentos, artículos de uso diario, entre otros.
Como criterios básicos para la coloración, se toman los siguientes puntos:
- Tono deseado
- Especificaciones técnicas del producto (resistencia mecánica o al impacto)
- Tipo de resina a pigmentar
- Incorporación de aditivos
- Proceso y condiciones operativas
Los pigmentos orgánicos conocidos como clásicos cumplen con la resistencia al calor necesaria en la plastificación del PVC. La solidez a la luz depende de los requisitos del producto final. Así, por ejemplo, en el recubrimiento de mangos de herramientas donde los tonos son generalmente cálidos (amarillo, rojo o naranja). También son utilizados los pigmentos fluorescentes y perlescentes.
La coloración del PVC flexible se caracteriza por la forma física del pigmento según el proceso de transformación. En la siguiente tabla se da una recomendación.
Se sugiere emplear el pigmento en forma de preparación pigmentaria o masterbatch en la transformación del PVC flexible, con el fin de mantener una buena dosificación, automatización, fuera de errores de dispersión, limpieza en la fabricación y concentraciones de acuerdo con el uso y proceso.
• Gili Bas E. 1990, Coloración de materias plásticas, España, Centro español de plásticos.