Coloración de rafias de Polipropileno
En los últimos años, ha incrementado la producción de rafias y multifilamentos de polipropileno. No obstante, lograr una coloración efectiva requiere cumplir ciertas condiciones clave en el proceso, que incluyen mantener alta estabilidad al calor durante el hilado, asegurar una dispersión óptima, buena solidez a la luz, poder tintóreo y capacidad de cubrimiento adecuados para mejorar la apariencia del hilo.
La distribución del tamaño de partícula del pigmento desempeña un papel esencial. El poder tintóreo de un pigmento, por un lado, se ve beneficiado por su aumento en el área superficial a medida que las partículas se reducen en tamaño. Sin embargo, este incremento tiene un límite, donde la eficiencia disminuye y comienza a comportarse como transparente. Por otro lado, para obtener un poder de cubrimiento adecuado, el tamaño de partícula es mayor que el requerido para lograr la máxima intensidad del color.
El poder cubriente de un pigmento se ve mayormente influenciado por cómo la luz se absorbe y dispersa, mientras que el poder tintóreo está principalmente ligado a la absorción lumínica.
Aunque no hay ecuaciones matemáticas que determinen el tamaño exacto de partícula para equilibrar estas propiedades, se pueden realizar pruebas de laboratorio para encontrar la mejor solución de cada sistema específico. Para igualar un color, es crucial proporcionar un estándar físico al laboratorio, ya que el color se ajusta en función del grosor de la pieza, proceso y sistema de moldeo, lo que afectará la concentración y tipos de pigmentos en el masterbatch.
En la formulación son utilizados principalmente pigmentos orgánicos, aunque hay excepciones notables como el dióxido de titanio, el negro de humo y el óxido de hierro. La dispersión del pigmento juega un papel crucial en este proceso debido a que se manejan títulos de hilo muy finos
El proceso de fabricación de las rafias implica extruir el polipropileno, seguido de un enfriamiento y estiramiento mediante rodillos. En este proceso, es común que el tono final de la rafia parezca más claro debido a la elongación. Para corregir esto, una solución inmediata es aumentar el porcentaje de aplicación del masterbatch y realizar pruebas hasta alcanzar la concentración esperada del color. Sin embargo, es importante tener una formulación precisa del color desde el principio para evitar utilizar más material del necesario, además de comunicar cualquier cambio en las condiciones del proceso al fabricante del masterbatch, modificaciones en la resina o la inclusión de material reciclado
• Expertos de Colorbatch
• Gili Bas E. 1990, Coloración de materias plásticas, España, Centro español de plásticos.